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Entreleyendas, es un blog creado para integrar a personas con un interés común como es: Contar las experiencias que han sucedido acerca de situaciones que han pasado a formar parte de la sociedad y de su imaginario. A través de una serie de comentarios, fotos, e incluso videos, que nos permitan expresarnos y quien sabe si desahogarnos.

¿Te ha suceso un hecho paranormal(fenomenos que contradicen lo natural)?

domingo, 12 de julio de 2009

ENTRE MIEDOS Y RISAS

No existen muchos programas que nos resulten miedosos y que nos hagan poner hasta nerviosos...
Quizás sea por su mala producción, o la manera en cómo lo exponen o por la trama que llevan, no lo sé..
Pero lo único que puedo decir es que hay un programa que si me ha provocado sobresaltos, se llama: " 13 MIEDOS", una producción mexicana...
Pero como en todo programa famoso, se crean nuestros productos y comerciales que lo promocionan de maneras pelculiares y éste no es la excepción..
Miren lo que inventó "DORITOS", basado en este programa, que te hará reir...

Ah por cierto, faltan más capítulos...
Si te gustaron, buscalos e incluso escoge uno de los finales de los que te proponen..

sábado, 4 de julio de 2009

Video "El Gallo de La Catedral"



MDM Quito
"CANTUÑA Y EL ATRIO DE SAN FRANCISCO"

Famosa es la leyenda que cuenta cómo el convento de San Francisco de Quito fue construida por Cantuña mediante pacto con el diablo. Ésta relata cómo Cantuña contratista, atrasado en la entrega de las obras, transó con el maligno para que, a cambio de su alma, le ayudara a trabajar durante la noche. Numerosos diablillos trabajaron mientras duró la oscuridad para terminar la iglesia. Al amanecer los dos firmantes del contrato sellado con sangre: Cantuña por un lado, y el diablo por el otro, se reunieron para hacerlo efectivo.

El indígena, temeroso y resignado, iba a cumplir su parte cuando se dio cuenta de que en un costado de la iglesia faltaba colocar una piedra; cuál hábil abogado arguyó, lleno de esperanza, que la obra estaba incompleta, que ya amanecía y con ello el plazo caducaba, y que, por lo tanto, el contrato quedaba insubsistente .

Ahora bien, la historia, a pesar de haber contribuido al mito, es algo diferente. Cantuña era solamente un guagua de noble linaje, cuando Rumiñahui quemó la ciudad. Olvidado por sus mayores en la historia colectiva ante el inminente arribo de las huestes españolas, Cantuña quedó atrapado en las llamas que consumían al Quito incaico.

La suerte quiso que, pese a estar horriblemente quemado y grotescamente deformado, el muchacho sobreviva. De él se apiadó uno de los conquistadores llamado Hernán Suárez, que lo hizo parte de su servicio, lo cristalizó, y, según dicen, lo trató casi como a propio hijo.

Pasaron los años y don Hernán, buen conquistador pero mal administrador, cayó en la desgracia. Aquejado por las deudas, no atinaba cómo resolver sus problemas cada vez más acuciantes. Estando a punto de tener que vender casa y solar. Cantuña se le acercó ofreciéndole solucionar sus problemas, poniendo una sola condición: que haga ciertas modificaciones en el subsuelo de la casa.

La suerte del hombre cambió de la noche a la mañana, sus finanzas se pusieron a tal punto que llegaron a estar más allá que en sus mejores días. Pero no hay riqueza que pueda evitar lo inevitable: con los años a cuestas, al ya viejo guerrero le sobrevino la muerte. Cantuña fue declarado su único heredero y como tal siguió gozando de gran fortuna. Eran enormes las contribuciones que el indígena realizaba a los franciscanos para la construcción de su convento e iglesia. Los religiosos y autoridades, al no comprender el origen de tan grandes y piadosas ofrendas, resolvieron interrogarlo. Tantas veces acudieron a Cantuña con sus inoportunas preguntas que éste resolvió zafarse de ellos de una vez por todas. El indígena confesó ante los estupefactos curas que había hecho un pacto con el demonio y que éste, a cambio de su alma, le procuraba todo el dinero que le pidiese.

Algunos religiosos compasivos intentaron el exorcismo contra el demonio y la persuasión con Cantuña para que devuelva lo recibido y rompa el trato. Ante las continuas negativas, los extranjeros empezaron a verlo con una mezcla de miedo y misericordia. A la muerte de Cantuña se descubrió en el subsuelo de la casa, bajo un piso falso, una fragua para fundir oro. A un costado había varios lingotes de oro y una cantidad de piezas incas listas para ser fundidas.

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